La introducción del EURR representa un paso importante para unir las finanzas tradicionales y la cadena de bloques. Brinda a los usuarios de toda Europa acceso a un euro digital estable que se puede usar para pagos diarios, transacciones en línea y remesas internacionales. Para las empresas, el EURR crea oportunidades para realizar transacciones transfronterizas más rápidas y económicas, mientras que para los consumidores, garantiza la transparencia y la confianza gracias al cumplimiento del MiCA.

El EURR funciona como otras monedas estables respaldadas por dinero fiduciario. Los euros se depositan en custodios regulados y se emite una cantidad equivalente de fichas EURR en la cadena de bloques. Cuando se canjea el EURR, los tokens se queman y los euros equivalentes se devuelven al usuario. Este mecanismo garantiza que cada EURR en circulación esté respaldado por reservas reales.

Si bien el EURR está respaldado por reservas y regulado por el MiCA, aún existen riesgos. Cambios normativos podría afectar a la forma en que se emite o canjea el EURR. También hay dependencias bancarias, ya que la estabilidad del EURR depende de que las instituciones financieras mantengan sus reservas. Por último, riesgos de adopción permanecen, ya que el EURR compite con otras monedas estables en euros y con posibles iniciativas digitales en euros de los bancos centrales.